miércoles, 27 de enero de 2016

AGUA DE RIOS

Navegando en mis recuerdos
por las aguas del Ariguanabo
viajaba un barco de papel,
aun corría limpia  y  cristalina
bajo los puentes hacia el sumidero,
como la vida misma corre
sin regreso hacia su meta.
Las casas humildes del pueblo
le veían pasar y un framboyán
dejaba caer en ceremonia
sus diminutas hojas como confetis.


Por las frías corrientes del Nevá
entre asombros y deslumbrado
por tanta majestuosa arquitectura
pasó el pequeño navegante
bajo la noche blanca,
siempre buscando el mar.
Serpenteando puentes
que se abren en la puesta del sol
cada escultura inmóvil le saluda
cada farola inquieta dice adiós
quedando atrás y lejanas
las altas cúpulas doradas.


Para entonces el Almendares
ya padecía su presencia gris
apenas flotaba en sus espejos la esperanza
fiel reflejo de una ciudad apuntalada.
Del mágico bosque que le arrulla
pasamos en el velero imaginado
bajo los arcos gigantescos del parque
donde el eco de los niños nos devuelve 
una sonrisa en nuestros remos improvisados
putrefacto de armonía 
y de colores imposibles.


Cruzamos entonces otra vez el ancho mar
hasta toparnos casi de sorpresa
el limpio Manzanares desbordando ternuras
de nueva infancia en sus riveras
viendo la felicidad en una familia de patos
que juguetean en la orilla,
como una fuente en medio del desierto
pequeño mar que humedece
una ciudad sin costas,
quijote de cristal geografía del corazón
donde todo lo que ausentas
te penetra como un rayo que despierta. 



Ahora anclado en la tibia
transparencia del Caloosahatchee river
con los pies en el agua
y sumergida la vida
en el rastro inocente de un manatí
siento que fluye de mi pecho
cada gota de estos ríos
vecinos eternos silenciosos
donde navegan mis recuerdos
en un pequeño y frágil

barquito de papel.


Imagenes de los rios tomadas de diferentes sitios de la red.

domingo, 24 de enero de 2016

CUENCA - NIDO DE AGUILAS


Allí, donde el hombre y la mies se maduran al sol
Donde luce el candil y se para el reloj
Donde brilla la luz y se duerme la noche
Tierra marrón y paredes de cal
Primaveras sin sol, visitantes de bar,
Aprendices de amor, labradores marchar
Y campanas de iglesia.


Por qué has hecho sonar hoy las campanas?
por qué has abandonado las callejas que
te vieron pasar día tras día?
¿por qué te has ido, amigo federico?
¿por qué se queda cuenca sin poeta?
dormida bajo los sauces del río que pasa;
bajo el murmullo del viento, la casa
de un poeta de mi ciudad.
dichosa la soledad salvaje que gozas,
bajo el feliz compás de las hojas
de los álamos, al soplar el viento.


...las calles se van cubriendo de musgo verde y de soledad
los nidos de golondrina se van cayendo
el canto del ruiseñor,
y el llanto de las campanas,
se quejan, por las mañanas al despertar.
silencio, que está mi pueblo
reunido para rezar
por esos que se marcharon,
por esos que marcharán, hacia otros campos.


Si quieres encontrarme búscame 
entre la gente llana de mi tierra
a caballo del sol y las estrellas
o en la dulce penumbra de mi cama.

Si quieres encontrarme pregúntale al espino
y te dirá que paso cada mañana por el camino.
Si no me encuentras ven a mi casa,
me encontraras llorando
por lo que pasa, por lo que pasa.

Si quieres encontrarme búscame 
bajo la sombra gris de las encinas
a caballo del viento y las colinas
o subido en la torre de la iglesia.



Podrá quedar muy lejos
ese pueblo viejo que dormía al sol.
Podré olvidar el tiempo
que burlando al viento me sentí mayor.
Podré olvidar las horas de la siesta en el desván,
mi caja de pinturas y mi afán de ser poeta un día.


El río cantará feliz
La leña me dará calor
La noche llegará,
Y yo la esperaré
El campo dormirá por fin.
Y en el amanecer el sol madrugará
Y me despertará feliz.

Me iré, me iré
mañana al despertar
A un sitio donde ver nacer el sol, el sol
Allí donde la vida es amor, amor.



Dices que soy hombre triste
Que llora mi corazón
Y es que yo encuentro mi mundo
En mi pequeño rincón
Y es que yo encuentro mi mundo
En mi pequeño rincón

Donde escuchar
El vuelo de las palomas
Donde llorar Si de llorar hay motivos
Donde quedarme Sólo.

Y escúchame, Mira las nubes que pasan
Y mi jardín Cuajado de margaritas



Pasó la primavera y el verano
Las lluvias del otoño y el invierno
La nieve en las montañas
Entro tímidamente y sin permiso
El sol por las ventanas
Crecía hierba buena en el camino
Seguía en su rincón el sauce y el ciprés
En los ribazos lirios y azucenas
Y en el patio naranjos
Aromas de geranio en los balcones
Y en la puerta el rosal de rosas nuevas...


Todas las letras, fragmentos de canciones de Jose Luis Perales.

miércoles, 13 de enero de 2016

DE PASO

Colibrí veloz y de alas transparentes
pasaste así por mi vida.
Yo fui carcomiendo de este amor
oxido de amor,
quedamos retratados bajo la lluvia fina
hijos de una misma ciudad.
Yo iba, ya sabes...
con mis poemas a cuestas
y a ti te miraba de puntillas el mar.
Allí se quedaron tal vez
aquellos versos ripios
que escribí por ti.
Quiero que te quedes, ave del insomnio
pero tengo mis estaciones
mi hambre, mi sed, mis miserias.
Bajo el escombro esperaré
que abras tus pétalos de vidrio

y escribiré el poema.

1995

viernes, 8 de enero de 2016

ESPLENDOR DE LA UTOPÍA

Nunca rompimos el ocaso con un grito

pisábamos los pasos de la muerte
exponiendo el corazón al frío y contando los instantes
segundos para sacar al sol viejas promesas
y colorear el cielo con palomas.

Una y otra vez
volvió la inocencia a quedarse en nuestras manos
y protegidos por la sombra de Dios
ahuyentamos la ternura y la razón.
La capa de ozono la rompieron unos locos
que dispararon al aire,
encontraron la verdad en todo lo que olía a ropa usada,
no comprendieron nunca los relojes
y se orinaron al unísono en el alba.
Recogimos la paz en cucharadas
colgamos la libertad en tendederas
y preparamos para el mundo la trampa del sosiego.
Nunca rompimos el ocaso con un grito
nunca la esperanza con el llanto
respondimos con la estocada del espejo

y salvamos nuestros ojos del horror. 

1991

IMAGENES Y POEMAS 4