En la obra de Silvio se destaca reiteradamente la época comprendida entre 1968 y 1970. Si bien su primera composición musical data de 1962 (El rock de los fantasmas) fue durante su estancia en el Servicio Militar Obligatorio donde comienza a tomarse en serio la música, la guitarra y las canciones. Una vez que termina, en 1967 comienza a relacionarse con músicos, poetas y es presentado en el programa "Música y estrellas" y muy poco tiempo después protagoniza el programa "Mientras tanto" en la television Cubana.
Ya para esa época el cantautor cuenta con un buen numero de canciones. En varias oportunidades Silvio habla de su paso por Experimentación Sonora del Icaic como la gran escuela que fue para el trabajar dentro del grupo y recibir las magistrales clases de Leo Brower, Juan Elósegui y Federico Smith.
Entre 1969 y 1970 viaja en varios barcos como miembro de la tripulación de pesqueros Cubanos por las costas de África. Compone 62 canciones. No en pocas de sus canciones de aquellos años se queja públicamente de la falta de difusión de su obra (y se me archiva en copias y no en originales) y se cuestiona la actitud de algunos dirigentes culturales de la época (los delimitadores de las primaveras) Llama la atención que su primer disco solista sale en 1975. Y en el segundo editado en 1978 y grabado en Madrid, retome canciones compuestas entre 1968 y 1970. Allí se concentran quizás las canciones mas emblemáticas de Silvio.
A lo largo de su extensa obra nos va intercalando temas de esa época, sacando a la luz inéditos, pero en 1999 en el disco "Mariposas" graba 6 temas de esa época y otros cuatro de 1971. Por lo que se puede decir que practicamente es otra manera de rescatar del pasado esas canciones, que forman parte de una importante etapa creadora del artista.
Y para confirmarnos esto que planteamos, llega en el 2006 "Erase que se era" que pone en nota del autor en la carátula interior del disco: Erase que se Era no es más que mi insistencia en reparar un vacío: un pago más de mi deuda con la acumulación de experiencias que me llevó hasta Días y Flores.
El artista vuelve una y otra vez a esa fecha, recrea sus creaciones de antaño y tal pareciera que fueran compuestas hoy, cuando realmente son composiciones que ya cumplen los 40 años. La temática y complejidad musical de esas canciones,de las cuales aun hay un buen numero de inéditas (unas rodando de mano en mano) y otras supongo que celosamente conservadas por el autor, son la mejor ejemplo del quehacer creativo de Silvio, de la diversidad de temas que aborda en su obra, y son una clara muestra de lo que le deparaba en el futuro a este peculiar artista, cosa que ya es historia. Un Silvio en estado puro, del que brotaban canciones como si fuera un manantial inagotable, desbordado de talento, ingenio y creatividad.
Ya después llegan las indispensables "Unicornio" "La maza" "Oh melancolía" "El necio" y otras muchas canciones posteriores a la etapa a que nos referimos, pero sin lugar a dudas están todas, apoyadas en los cimientos de una solida obra juvenil de sus primeros años.
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